Hace un par de años, tuvimos la ocasión de ver "Anvil!, The story of Anvil", maravilloso documental sobre la cara menos amable del mundo del rock: La que muestra cómo multitud de bandas con un efímero momento de gloria siguen adelante muchos años después sin desfallecer incapaces de abandonar los escenarios bien sea por una fe ciega en un retorno a la gloria o bien porque sencillamente porque tocar (aunque sea delante de cuatro gatos) es lo único que les mantiene vivos.
Si en "Anvil!..." veíamos a sus protagonistas haciendo trabajos de poca monta para poder gastarlo en grabar y tocar, en éste nuevo documental "Last Days Here" vemos una cara todavía mucho más extrema de la caída en desgracia de una ex-rock star. En este caso el protagonista es Bobby Liebling, alma mater de Pentagram, una oscura banda de hard rock que durante los 70 estuvo a un paso de jugar las ligas mayores del rock pero que hasta los 80 (y de manera marginal) no consiguió editar un álbum de manera oficial. Desde entonces el seguimiento de culto hacia Pentagram ha ido creciendo en paralelo a la caída en desgracia de Bobby, literalmente enterrado durante lustros en el sótano de la casa de sus padres atrapado por incontables adicciones y problemas psicológicos.
- Estoy acabado compañeros |
Para mi la cinta tiene dos grandes puntos de interés, el primero desde el punto de vista humano, esta película es un gran catálogo de motivaciones vitales, sobre lo que nos motiva a seguir adelante cuando estamos por los suelos (y no hablo sólo por Bobby, la historia de sus padres no tiene desperdicio, ni la del promotor empeñado en rehabilitar a Bobby para la vida musical....). No negaré que la primera parte puede ser dura de ver (eso es duro de digerir compañeros), pero el discurrir de los hechos narrados nos depara sorprendentes giros.
- Hey, esto mola más, ¿no? |
Un gran documental, tanto desde el punto de vista humano como el musical, con sorprendentes giros en una historia que es menos tópica de lo que puede parecer de antemano. Es muy grande que los documentalistas rockeros se hayan dado cuenta que son más interesantes las historias de artistas anónimos que las de mega-estrellas. Por cierto nunca había escuchado a Pentagram y estoy enganchado!!!!!
Valoración: 8/10
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3 comentarios:
Pinta cojonudo... y muy triste
Ya somos dos los enganchados a Pentagram gracias a este documental. Para mi gusto superior al de Anvil (muy bueno, por otra parte).
Saludos Doc.
Yo ya les escuchaba, pero aun no he visto el documental, últimamente no tengo el cuerpo para dramas. Pero tarde o temprano caerá.
Y como demostró el Serie Z del año pasado, al final el fan/promotor lo consiguió.
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