"¡Viva el vino!" (Mariano Rajoy, 2007)

Abrumador The Wall en Barcelona

Casi no me acuerdo de cuando salió The Wall salvo el famoso single que estaba en todas las radios, pero desde que unos años después empecé a recolectar grabaciones en cassette y me pude comprar una edición en un vinilo de segunda mano, este disco ha significado mucho para mi. No se trata solo de calidad (impresionante) o de que sea uno de los grandes álbumes conceptuales de la historia (seguramente el último), es que sus valores se ven realzados por su extrañeza y bizarrería, es imposible no sentirse atraído por una propuesta tan extrema, imaginario al que contribuye claro, la película de Alan Parker con las alucinadas animaciones de Gerald Scarface. Cuando más tarde me enteré del concepto de concierto que se hizo en su día  (1980) sentí aquello de "¿quien hubiera podido estar ahí?": una presentación tan cara de la que apenas se pudieron hacer 15 representaciones en tres ciudades del mundo, una grabación en vídeo nunca editada oficialmente salvo ediciones piratas que no he podido conseguir hasta hace poco.... Pero la vida a veces da segundas oportunidades y yo, de verdad que en este caso, me la merecía: Pink Floyd es seguramente mi banda favorita de la historia y pese a haber estado dos veces en Barcelona sin Waters (en sus giras de 1987 y 1994), y habernos visitado éste último en dos ocasiones en la pasada década, por unos motivos u otros nunca pude asistir, así que esta amigos, era mi ocasión, y vaya si mereció la pena.


Abrumador e impresionante lo que pudimos vivir ayer en un Pala Sant Jordi a reventar, francamente por encima de las expectativas. El espectáculo te deja empequeñecido, acojonado, te hace volver a la adolescencia y en una palabra "flipar" con las dimensiones del montaje, el sonido y la calidad de la interpretación, impecable. Waters luce una voz en muy buen estado (arropado por supuesto por otros vocalistas), y hace gala de una banda completamente eficaz. La calidad de las proyecciones sobre la enorme pantalla del muro (aprox 50 x 15 m) hace de la segunda parte del concierto una experiencia que se aleja del concierto de rock típico y lo convierte en una experiencia multimedia realmente eficaz que requiere de cierta distancia del escenario para poder apreciar el show en toda su magnitud: Marionetas gigantes, cerdos voladores, pirotécnia, aviones que se estrellan contra el muro, confetti, teatro, cine..., mil y un recursos para algo tan extremadamente bizarro como una banda tocando de manera invisible tras un muro: El concepto es se piense como se piense acojonante. Y de todo ello algunos dirán que solo es parafernalia, y podría estar de acuerdo si las interpretaciones no hubieran estado a la altura, pero lo estuvieron, y en conjunto convirtieron la experiencia en algo inolvidable que por encima de todo sirvió para volverse a dar cuenta de que The Wall es uno de los mejores álbumes de la historia del rock.


Algunos momentazos: El solo de Confortably Numb siempre es un highlight y en este caso con el guitarrista retroiluminado como una aparición celestial sobre las psicodélicas proyecciones fue un momento épico, tenía curiosidad por ver como solucionarían el The trial ciertamente difícil de adaptar al directo y la solución fue sobria y eficaz con Waters en primer plano cantando usando las potentes imágenes de la película, el Run Like Hell ciertamente poderoso y en el que eché en falta más colaboración del público en un tema que se presta mucho a ello, el Another Brick in the Wall 3, con momentos instrumentales nuevos muy interesantes (aprecié tres o cuatro fragmentos instrumentales durante el concierto nuevos para la ocasión , cosa que agradecí bastante), y sobre todo el "Waiting for the worms"/In the flesh cuyo famoso momento del ejércido de martillos marchando me hizo levitar ante lo intenso y abrumador del momento visual y musical. Y al final un Waters que se despidió confesando lo aliviado que estaba de poder pasear por el mundo este espectáculo, cosa que no pudo hacer hace 30 años. Pues Gracias Sr. Waters.

No todo fue perfecto por supuesto pero quien se acuerda de lo malo en una noche como la de ayer?

Saludos floydianos mientras escuchoYoung lust, uno de mis temas favoritos del álbum y que sonó de maravilla acompañado de imágenes subiditas de tono....


Por cierto, al fin puedo mirar los vídeos del espectáculo, llevo meses evitándolos y así pude conseguir algo que parece imposible con la sobreinformación globalizada que nos azota : sorprenderme.

12 comentarios:

Benet dijo...

Yo también estuve y lo pasé genial. En cuanto a la música poco a comentar ya que nos la sabemos de memoria pero es que lo visual fue épico. Los músicos a la altura aunque encontré a faltar mucho a David Gilmour.
En el 94 ví a Pink Floyd en el antiguo estadio de Sarrià y, tengo que decir que me gustó incluso más que éste. Pero es que siempre he tenido una predilección especial por Gilmour, no puedo evitarlo. Para mí es uno de los mejores guitarristas EVER.
Me alegro mucho que disfrutaras.

Rul Sky dijo...

Vaya que envidia me das, siempre me fascinó ese espectáculo sonoro y visual que es The Wall, sin duda uno de los mejores discos de la historia. Visionando las grabaciones de esos conciertos uno siente que se le escapó uno de los momentos cumbre de la escena musical. Felicidades por poder asistir, puedes sentirte afortunado.

Un saludo.

ANRO dijo...

Yo hubiera dado un año de mi vida por estar en el Palau, porque este grupo ha marcado determinados momentos de mi vida, en especial el 70 con "Ummagumma", el 73 con "The Dark Side of the Moon" y sobre todo el "Wish you Where Here" en 1974, cuando inicié una nueva vida con ese vinilo entre mis manos. Un tesoro que justo lo conservo desde que lo compré en Londres y vine a España con él y toda la colección precedente.
"The Wall" fue el punto de contacto entre mi hijo y yo....¡Cómo no va a ser Pink Floyd mi grupo favorito con diferencia!
Un abrazote.

TSI-NA-PAH dijo...

Fue una pasada poder verlo en Madrid!
Un saludo

Santi "Krazy" WolfDj dijo...

Yo fui a primera fecha en Madrid. Alucinado sali, encantado, feliz de estar alli. Es algo que todo seguidor de rock deberia de experimentar cuanto menos una vez en su vida.

Saludos!!!!

Lucifer, Becario del Mal dijo...

este es una de las movidas destacadas del año sin duda, el lugar donde había que estar.
Cosas de la vida, me tocaba estar en otro lado así que tendré que esperar a que salga en DVD.

Antonio de Castro Cortizas dijo...

Ya leí la reseña de "El alimento de los dioses", efectivamente tan cojonuda como mala es la película.
(Por cierto, ¿qué fue de Pamela Franklin? ¿Cómo es que una actriz tan buena pudo empezar tan bien su carrera y terminarla con unas películas tan malas?)

eulez dijo...

Joder, fue cojonudo e inolvidable!

(Pues mira que a mi "Young Lust" me parece, con diferencia además, la "peor" canción del disco...)

Alfie dijo...

Creo que Young Lust es una canción muy de su momento, para mí el peor tema o el que personalmente aborrezco es el más famoso, el another brick in the wall part II, que me aprece mejor la revisión de Tom Morello, Layne Staley, Stephen Perkins, Martyn LeNoble, Matt Serletic que integraban Class of 99, perdía la emparentaba más con el espíritu real del albúm de los Floyd y se hacía más barroca. Ya sé es una opinión personal y creo que levantaré las iras de mis estimados Eulez, LuisCifer o de usted. En mi retina y mente se mantiene indeleble como una huella digital el momentazo Vera-Bring the boy+COnfortably numb. Sólo por ver eso merecía la pena pagar. Impresionantes. Y me uno a usted en rescatar ese temazo que es Run Like Hell.

miquel zueras dijo...

"The Wall", qué recuerdos... el primer álbum que me compré. En casa siempre estaba sonando el " I Wish you where Here" de mi hermano mayor. Lo puso tantas veces que el disco quedó hecho polvo. Borgo.

Dr. Litos dijo...

Sin haberla visto en directo, me da la impresión que "Young lust" puede funcionar mucho mejor en ese formato que en el disco. No olvidemos que "la peor" canción de un discazo como The Wall siempre será un temazo.

Enhorabuena por poder asistir, Dr... y gracias por compartirlo.

Dr. Quatermass dijo...

buenas, Young Lust me parece un temazo porque es uno de los pocos temas comerciales digamos (salvo el another brick 2 of course) y plantar en medio de The Wall ese temazo de AOR con esas guitarras musculosas le da chicha al disco, claro que prefiero antes otras 10 pero es que es un álbum sin desperdicio!

Un saludo y gracias por los comentarios!