Legion (una de zombies angelicales)

Scott Stewart, 2010
Esta película ha sido vapuleada por casi todo el mundo, pero mira, a mi me ha caído simpática por diversos motivos por mucho descerebramiento argumental que atesore: Si a Dios le da por borrar a la raza humana de la faz de la tierra, uno pensaría que vía poder divino eso es un plis-plas, pues... ¡No!, resulta que decide zombificar a la mitad de la población para que ésta acabe a mordiscos con la otra mitad, método este de dudosa eficacia, pero que anda que no mola más. Además envía a la tierra a unos curiosos arcángeles con alas metálicas y mazas que sacuden hostias como panes (¡Thor celestial!). Por si fuera poco, como en toda historia bíblico/apocalíptica que se precie tenemos a la embarazada cuyo bebé salvará a la especie humana. Toma ya empanada zombie-angelical-apocaliptica, aparentemente para salir corriendo….

Pues a mi me ha molado. Sí, porque si uno obvia el sinsentido de la trama y se queda con el núcleo (un ecléctico grupo de personas atrapado en una gasolinera resistiendo las acometidas de las hordas zombies), resulta que esta película recupera el espíritu de la mejor serie-B (calificativo que para algunos es despectivo, pero para mi es una virtud en cuanto suele intentar desarrollar unos personajes en contraposición al blockbuster). Perfectamente consciente de lo limitado de sus recursos (el caché de Dennis Quaid tampoco debe ser para tirar cohetes a estas alturas) se recupera el espíritu de films como “La Cosa” o la reciente “La Niebla”, léase grupo de personas en situación extrema que van cayendo uno tras otro mientras intentan aprender a relacionarse.

 -¿Quien queda vivo? Se admiten apuestas...-

Además los zombies-ángeles-demonios (o lo que sean, leñe) son de lo más cabroncetes y las trampas que van planteando para conseguir entrar en la gasolinera de marras tienen su punto. Que si que ya sé que 5000 zombies intentando entrar en una gasolinera a base de triquiñuelas cuando la pueden arrasar a mordiscos tampoco es creíble, pero mira debía tener yo el día tonto. Y para los 20 minutos finales pues tenemos el angelote-show (algo que agradecerán los que se dejaron engañar por el trailer), pero vamos que tampoco es que sea nada del otro mundo, eso sí, resuelto con toda la eficacia que da tener presupuesto para un solo ejército de ángeles (compuesto por dos de ellos, concretamente). Ignoraremos el hecho de que al protagonista le salgan inscripciones por todo el cuerpo y el angelote bueno le inste a “buscar a los profetas” y se acabe la peli sin saber lo que dicen las inscripciones o donde están los profetas, pero a estas alturas hemos perdonado tantos defectos que ya no vamos a mirar uno más.

-¿Thor?, andestá que mi maza es más grande-

Así que por mis cojones que a este “películo”, sub-producto, o bodrio, le voy a poner un fantabuloso 6/10, porque me lo he pasado bastante bien entre tanto despropósito y ya digo que obviando ciertos aspectos tiene partes que están bien. Especialmente recomendada a los amantes de la serie-B fantástica de los años 70-80 por cierto. Ahora ya podéis darme hasta en el carnet de identidad, pero como me canonicen por ello y me den la maza… ¡ya podéis prepararos!
Valoración: 6/10
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